Trabajadores, pensionados y jubilados marcharon este 21 de julio en el centro de Caracas con destino a Miraflores; para exigir mejorías salariales y laborales al Gobierno de Nicolás Maduro.
Uno de los manifestantes, sacó sus zapatos rotos y exigió al gobierno, ver cómo los trabajadores padecen por no tener un salario digno.
«No nos han pagado, nos tienen sueldos de hambre. Esto no es mentira Maduro esta es la realidad de los trabajadores del país»; expresó.
La marcha tenía como destino el Palacio Presidencial; sin embargo no pudieron llegar y el rumbo se cambió hasta el despacho de la Defensoría del Pueblo, ubicada en la Avenida Urdaneta de Caracas.
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Al respecto, Ana Rosario Contreras, presidenta del Colegio de Enfermeras de Caracas; denunció que nuevamente el gobierno de Maduro «abusó de su poder».
«Maduro a través de un grupo violento, impidió que llegáramos a Miraflores, pero nosotros seguiremos en las calles y no saldremos del Centro, no tenemos miedo», dijo Contreras.
Además, madres trabajadoras se unieron al llamado a la protesta y una de ellas reveló a nuestras cámaras que con lo poco que gana no puede mantener a su familia.
«Gano sueldo mínimo y con eso no puedo ni comprar la leche para mi hijo para que pueda comer, Maduro tiene que ponerse en los zapatos de los trabajadores», indicó.
